Las lesiones de la médula espinal son la principal causa de discapacidad en el mundo desarrollado  (ver aquí).

Por ello, tratar de encontrar soluciones terapéuticas, es un objetivo médico primordial. Se han llevado a cabo estudios experienciales prometedores e incluso se han publicado varios ensayos clínicos con células mesenquimales autólogas de médula ósea, que se administraron intramedularmente. Ahora se descubre la posibilidad de hacerlo intravenosamente, lo cual facilita sustancialmente el tratamiento. Los autores concluyen que “sus observaciones muestran la facilidad, seguridad y mejora funcional de infundir células troncales mensequimales autólogas para tratar a los pacientes con lesiones de médula espinal. Siempre que se facilite el tratamiento de un trastorno clínico importante nos parecerá un avance bioético muy positivo.