Según se comenta en el Daily Telegraf (18-IX-2013), la directora ejecutiva de una de las mayores asociaciones proabortistas de Inglaterra,  Anne Furedi,  piensa que se debe  permitir a las mujeres abortar si no están de acuerdo con el sexo del hijo que esperan. Todo ello se ha suscitado porque las autoridades británicas han decidido no condenar a dos médicos que se negaron a practicar un aborto porqué  la madre no le gustaba el sexo de su hijo. Ante esta decisión un grupo de 50 parlamentarios británicos manifestaba que tal decisión es un retroceso en la lucha por la igualdad de género. Además, según Anne Furedi ,  la decisión de estos médicos podría dañar la salud mental de la madre, porque el aborto es legal en ese país.