Los Institutos Nacionales de Salud (NIH) norteamericanos revierten los límites propuestos por el gobierno de Trump para utilizar tejidos fetales para investigaciones biomédicas, de acuerdo a un informe publicado el pasado 1 de abril, especialmente reduciendo las subvenciones estatales que existen para este tipo de experiencias, aunque se continua requiriendo el consentimiento de los donantes. A la vez se concluye que no se pueden incentivar económicamente dichas donaciones y que se guarde respeto a las leyes particulares que cada Estado tenga sobre esta materia (ver más AQUÍ).