Mucha gente sigue interesada en saber de forma lo más segura posible, por razones morales, qué vacunas utilizan células procedentes de abortos provocados, tanto para su producción, como para su evaluación experimental.
Ahora el Instituto Charlotte Lozier ha publicado un completo informe de en qué medida, las ocho vacunas más próximas a la comercialización o ya comercializadas, utilizan células procedentes de abortos antiguos provocados para su producción o en su fase experimental (ver AQUÍ).
Las dos vacunas hasta ahora comercializadas, Pfizer y Moderna, no utilizan este tipo de células para su producción. Tampoco la utiliza la vacuna de Novavaxab, que aunque no comercializada, está ya en fase III de ensayos clínicos. En cambio, sí que las utilizan las vacunas de Oxford-AstraZeneca y la de Johnson & Johnson.
En cuanto al uso de estas células en la fase experimental, las tres vacunas, Moderna, Pfizer y Novavaxab ofrecen un resultado más incierto, pues en algunos casos las utilizan y en otros no. De todas formas, hay que recordar que los documentos emitidos por la Iglesia Católica para valorar la moralidad del uso de estas vacunas, manifiestan que la posibilidad de que en su fase experimental se hayan podido utilizar células de abortos producidos hace ya mucho tiempo (ver más) no es un obstáculo moral para su uso.
Sin duda, es una muy positiva noticia que las dos vacunas actualmente comercializadas. Pfizer y Moderna, puedan utilizarse sin restricciones éticas, por no haber utilizado en su producción células procedentes de abortos provocados antiguos.
Son vacunas? Son eficaces? Por qué hay personas vacunadas con la segunda dosis que han muerto de covid?