Un pequeño estudio clínico realizado en California, sugiere por primera vez que es posible revertir el «reloj genético corporal», que es la edad biológica de una persona.

En dicho estudio, nueve voluntarios se sometieron durante un año a recibir una combinación de tres fármacos habitualmente utilizados (dos fármacos anti y una hormona del crecimiento), consiguiéndose que, de media, rejuvenecieran 2,5 años, valorando esto por marcadores analíticos y el estudio de sus genomas personales. También su sistema inmune mostró signos de rejuvenecimiento. Estos resultados fueron inesperados, incluso para los propios facultativos promotores del ensayo, pero ellos mismos sugieren que hay que valorar con precaución estos resultados, pues el grupo participante es pequeño, los hallazgos con preliminares, y sobre todo, porque no se ha incluido un grupo control.

 

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