El niño más pequeño del mundo que ha sobrevivido, ha recibido el alta médica tras haber alcanzado los 3.238 gramos de peso. El bebé nació el pasado mes de agosto y pesó 268 gramos. Nació en la clínica de la ciudad japonesa de Keio. El record del niño más prematuro sobreviviente lo tenía hasta ahora uno nacido en Alemania en 2009, que pesó 274 gramos. También en Alemania, nació en 2015, la niña más pequeña, que pesó 252 gramos. El facultativo responsable del caso, Dr. Takahashi Arimitsu, manifiesta que en este caso demuestra que estos niños «pueden salir sanos del hospital pese a haber nacido tan pequeños». Realmente el éxito fundamental de este caso es que el niño al ser dado de alta no padecía secuelas médicas  secundarias (ver más AQUÍ).