En Canadá el suicidio asistido es legal desde junio de 2016, pero ya desde un año antes Quebec tenía su propia ley sobre eutanasia. La revista médica Le Spécialiste ha analizado el caso de la región francófona para evaluar el impacto de esta ley en el tiempo. El artículo se centra en la ciudad de Laval, que tiene 435.000 habitantes. Según dicho artículo, la realidad es muy distinta, pues el 77% de los médicos que ha recibido solicitudes para ayudar a un paciente a morir se han negado a participar, utilizando todos ellos la objeción de conciencia (ampliar información AQUÍ).