Maternidad subrogada. Un grupo de filósofas luchan contra esta práctica que en su opinión degrada a las mujeres y las convierte en máquinas reproductivas

Alicia Miyares es filósofa y escritora feminista. Desde que hace un par de años se implicó en el movimiento «No somos Vasijas«, junto a otras filósofas, como Amelia Valcárcel y Victoria Camps, dedica buena parte de su tiempo a luchar contra la gestación subrogada. De momento, recurrir a un vientre de alquiler para tener un hijo es una práctica prohibida en España, aunque su posible regulación ha entrado de lleno en el debate político. Miyares no ahorra críticas a lo que entiende que no es más que un eufemismo bajo el que se esconde un negocio degradante para las mujeres al rebajarlas a meras máquinas reproductivas. La última semana de abril, Miyares y 50 organizaciones de mujeres y colectivos LGTBI presentaron, en una rueda de prensa en Madrid, la Red Estatal contra el Alquiler de Vientres en cuya página web dejan clara su postura: «No somos incubadoras, ni vasijas, ni úteros o vientres de alquiler: somos mujeres, vidas humanas con las que pretenden montar un nuevo negocio que lucrará al más fuerte y someterá a las más débiles» (Ver AQUÍ).

*Foto: No somos Vasijas