El sida sigue teniendo importantes problemas éticos sin resolver.

Según se comenta en The Lancet  , desde que se descubrió el Sida en 1981, se han producido más de 75 millones de infecciones por el virus del VIH y han muerto más de 36 millones de personas. Pero lo positivo es que la infección por este virus ya no es una infección mortal sino una enfermedad crónica tratable. Pero actualmente menos de la mitad de las personas infectadas por el VIH tienen acceso a una terapia  antirretroviral que pueda ser decisiva para salvarles la vida.

Congreso convocado para atender a todos los infectados por VIH

Por ello la XXI Conferencia Internacional sobre el sida, que se celebrará del 18 al 22 de julio en Durban, Sudáfrica, tiene como uno de sus principales objetivos ver como este tratamiento puede extenderse a la mayor cantidad de infectados con VIH en el mundo. Dado además que la incidencia de la infección por el VIH no disminuye, hacer accesibles los tratamientos es una medida sanitaria inaplazable, especialmente en el África subsahariana, y muy especialmente entre los homosexuales jóvenes y las mujeres transexuales y en las personas que se inyectan drogas en Europa del este y Asia Central.

Un principio elemental de justicia social en el campo de los derechos humanos, requiere que los tratamientos antirretrovirales estén accesibles a todos los infectados por el VIH, cosa que ahora no ocurre.