Su uso puede ser remplazado por células madre IPS sin necesidad de destruir un embrión humano.
Las células pluripotenciales pueden desarrollar funciones de cardiomiocitos y así ser utilizadas para reparar corazones lesionados. Las experiencias en este campo son numerosas. Estas células se han podido derivar especialmente de embriones humanos (células madre embrionarias) o de células adultas reprogramadas (células iPs). El uso de las primeras tiene la grave dificultad ética de que deben extraerse de embriones humanos que hay que destruir y el de las segundas, que aún existen dificultades técnicas que resolver antes de poder ser utilizadas en la clínica médica.
Otra dificultad añadida para el uso de estas células en la terapia cardiaca, es que hasta ahora no se han podido producir cardiomiocitos en las cantidades necesarias para poder regenerar lesiones de corazón extensas.
Ahora se publica un artículo en Nature ( 510;273-277,2014) en el que se describe una técnica para producir, a partir de células madre embrionarias, suficiente cantidad de cardiomiocitos para poder reparar corazones de gran tamaño, en este caso de primates, pudiendo reponer cantidades sustanciales de tejido del corazón lesionado de esos animales.
Los autores comentan que también se podría regenerar el musculo cardiaco de corazones humanos, aunque hay primero que salvar algunas complicaciones que pueden presentarse, especialmente arrítmias.
Sin embargo, desde un punto de vista ético no hay que olvidar que para poder obtener los cardiomiocitos se utilizan células madre embrionarias humanas, con la dificultad ética que ello supone.