Autor: Juan Morote Sarrión
Editorial: Obra Abierta

 

El lector tiene en sus manos un enfoque interdisciplinar y toda una batería argumental que, desde diferentes enfoques empezando por los meramente racionales y terminando en los jurídicos formales, permiten sostener que el concebido es persona. Para lograrlo se han utilizado dos paradigmas discursivos como son la contraargumentación contra el sofisma y el pensamiento tópico, y la argumentación propositiva como reto frente al pensamiento débil, en definitiva, frente al relativismo. Este ensayo evidencia la necesidad de separar las posturas amparadas en el emotivismo de los postulados fundamentados en la razón.

Debemos tener siempre presente que no se puede estar a favor de la vida en algunos casos, del mismo modo que no se puede estar a favor de la libertad dependiendo de lo que me convenga. O se es defensor de la vida o no se es. O se es defensor de la libertad o no se es. La defensa de la vida conlleva, al igual que la de la libertad, una exigencia de coherenciay, entre otras cosas, este trabajo evidencia la falta de coherencia en el pensamiento dominante.